DE PRÁCTICAS EN DOGKING

Paseos y peluquería

Andy ya conocía a DOGKING, pero su trato hasta ahora había sido siempre como cliente. Con estas prácticas se sumergía en el día a día de nuestro centro, trabajaría codo con codo con cada uno de nosotros y aprendería a trabajar con perros muy pequeños a los que hay que enseñarle prácticamente todo. Era todo un reto, pero sin duda esto era lo que le motivaba.

Por una parte, se encargó de los paseos a cachorros. Esta labor, aunque parezca cotidiana y sin dificultad es de vital importancia. El paseador es quien se encarga de mostrarle el mundo al cachorro. Es la persona que le va a enseñar al perro que puede confiar en el humano pues junto a él no le va a ocurrir nada malo. Con los paseos enseñó a nuestros cachorros a andar con la correa y no tener miedo de los coches y las personas que pasaban a su lado, ya que cuando son pequeños se bloquean y no andan cuando siente la correa en su cuello y los ruidos. A los perros más avanzados les enseñó a pasear sin tirar, a subir y bajar escaleras, a pisar diferentes texturas, a jugar en el césped…

Por otro lado, también estuvo ayudándonos como auxiliar de peluquería. Aprendió a bañar cachorros, para que servía cada producto que utilizábamos, a usar las diferentes herramientas de peluquería, cómo tratar a un perro para que se porte bien mientras le bañamos y a trabajar al ritmo frenético de un peluquero.

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