LA PERRA ADIESTRADA QUE TRANSMITÍA TRANQUILIDAD

Un perro para una familia numerosa

Cualquiera puede pensar que en una casa donde hay cinco niños, un perro podría ser demasiado. Pero este no es el caso de la familia de María José, que a pesar de vivir todos juntos y compartirlo todo, sentían que había un hueco sin rellenar en la casa.

María José era muy consciente de lo que significaba tener un perro ya que había trabajado mucho tiempo con perros de exposición y sabía todo el trabajo que suponía. Además, tenía muy en cuenta el hecho de que 3 de sus hijos eran hiperactivos, por eso cuando se decidió a incluir a un perro en su familia, tenía claro que no pensaba en un cachorro.

Fue así como hace 5 años la conocimos en DOGKING cuando vino a informarse acerca de los perros adiestrados y Antonio le recomendó a Record, un Golden Retriever que cumplía los dos requisitos claves para encajar bien en la familia de María José: paciencia y tranquilidad.

La magia de un perro adiestrado

Cuando Record llegó a la familia, rápidamente comenzaron a sentir los enormes beneficios que un perro como él podía aportar a la familia. Según sus propias palabras, “la casa es como una olla exprés en ebullición constante”, con sus choques, riñas y discusiones entre unos u otros. Record llegó como una válvula de escape, capaz de amortiguar malestar y transmitir paz y armonía al grupo.

Con niños hiperactivos, fijar la atención y los límites es muy difícil y resulta muy sencillo perder los nervios y levantar la voz aunque esto sea contraproducente al efecto que queremos conseguir en la casa. Un perro adiestrado jamás pierde la compostura ante una situación estresante. De hecho, lo que intentará será calmar la tensión, lo cual resulta de gran ayuda para la familia.

Por otra parte, un perro adiestrado exige poner unos límites y rutinas para ser bien atendido y seguir obedeciendo en cualquier situación. Y sin pretenderlo, al fijarle unas pautas al perro, la familia se supo organizar mejor, responsabilizándose cada uno de una tarea y asumiendo en cierto modo la disciplina que pedían al perro. Record estaba consiguiendo lo que María José llevaba años trabajando.

El equilibrio que aporta el perro

Pero tras 5 años juntos, Record falleció y de repente la casa con 5 niños parecía vacía. En seguida notaron como si la casa se descompensara y no tardaron en volver a llamar a Antonio en busca de un nuevo perro que trajese de nuevo la armonía al hogar.

Fue así como conocieron a Luna, una hermosa Golden Retriever con unas características muy similares a las que hicieron de Record el perro perfecto para la familia. Luna es respetuosa, super sociable, le encantan los niños y siempre está tranquila.

Tras una semana con ella, fuimos a visitarlos para ver cómo se sentían con ella y todos estaban encantados. Les costaba distribuirse las tareas pues cada uno quería cepillarla, pasearla o darle de comer, pero todos coincidían en que era una perra maravillosa que les transmitía esa tranquilidad que tanto necesitaban.

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